El magnate Elon Musk ha compartido un adelanto de lo que tiene planeado para Twitter, luego de haber adquirido la red social la semana pasada por un valor de 44 000 millones de dólares.
Durante la Gala del Met 2022, evento anual organizado por el Instituto del Traje del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, y que tuvo lugar el lunes, Musk se detuvo a hablar con la presentadora del livestream de Vogue, La La Anthony, quien le preguntó cuáles son sus objetivos para la citada plataforma.
El director general de Tesla y SpaceX destacó que su intención sería “hacer que Twitter fuera lo más inclusivo posible, y que la mayor parte del país y del resto del mundo estuviera en Twitter, y que lo encontraran interesante, entretenido y divertido, y que les hiciera la vida mejor”, indicó.
Elon Musk llegó a un acuerdo a fines de abril para comprar Twitter por 44 000 millones de dólares, en una transacción que dejará el control de la plataforma de redes sociales que cuenta con millones de usuarios y líderes mundiales a la persona más rica del mundo.
El magnate ha presentado algunos planes, todavía vagos, para transformar Twitter en un lugar de “máxima diversión” y en una plaza pública digital “políticamente neutral”, que permita tanta libertad de expresión como permitan las leyes de cada país.
Él ha reconocido que sus planes para remodelar Twitter podrían enojar a algunos políticos.
Medios señalan que no ha especificado exactamente qué hará con la cuenta anulada del expresidente estadounidense Donald Trump y otros líderes de derecha cuyos tuits han violado las restricciones de la compañía contra el discurso de odio, las amenazas violentas o la desinformación dañina.
Lo que se sabe es que Musk no ha descartado suspender algunas cuentas, pero dice que tales prohibiciones deberían ser temporales.
Basado en su afición a la inteligencia artificial, Musk ha prometido “hacer que los algoritmos sean de código abierto para aumentar la confianza”. Habla de los sistemas que clasifican el contenido para decidir qué aparece en el feed de los usuarios.
Pero a algunos —en especial los más conservadores— les preocupa el “shadow banning”, una supuesta función para reducir el alcance de usuarios que se comportan mal, pero sin deshabilitar sus cuentas.
Musk quiere que Twitter “autentice a todos los humanos”, una propuesta ambigua que podría estar relacionada con su deseo de eliminar las cuentas de spam.
Aumentar los controles de identidad mundanos —como la autenticación de dos factores o las ventanas emergentes que preguntan cuál de las seis fotos muestra un autobús escolar— podría disuadir a cualquiera de intentar acumular un ejército de cuentas falsas.
Musk también podría estar considerando ofrecer a más personas la insignia azul para autentificar las cuentas de los tuiteros.
Pero a algunos activistas les preocupa que estas medidas puedan conducir a una política de “nombre real” similar al enfoque de Facebook de obligar a las personas a validar sus nombres completos y usarlos en sus perfiles. Eso podría contradecir el enfoque de libertad de expresión de Musk.
Musk ha planteado la idea de un Twitter sin publicidad, aunque no era una de las prioridades descritas en el anuncio oficial de fusión. Eso puede deberse a que eliminar la forma principal de ganar dinero de la compañía sería una tarea difícil, incluso para la persona más acaudalada del mundo.
Los anuncios representaron más del 92% de los ingresos de Twitter en el trimestre fiscal de enero a marzo. La compañía lanzó el año pasado un servicio de suscripción premium, conocido como Twitter Blue, pero hasta ahora con poco éxito.
(Con información de Russia Today y agencias)