La Habana, 28 may.- Una mirada sentida y desde múltiples voces a la vida y obra de una de las artistas cubanas más relevantes de las artes plástica es el documental Belkis Ayón: grabado de desasosiego (The engraving of restlessness), de la profesora y realizadora uruguaya Juanamaría Cordones-Cook.
La poeta y ensayista cubana Nancy Morejón, Premio Nacional de Literatura 2001, consideró que la obra de Cordones-Cook “ya es imprescindible para cualquier estudioso de la cultura contemporánea latinoamericana, especialmente para el campo del arte y la literatura en su dinámico quehacer del siglo XXI que habitamos”.
Con anterioridad, la también investigadora y escritora trabajó sobre figuras como Natalia Bolívar, Rogelio Martínez Furé, María del Carmen Barcia, Miguel Barnet (en proceso), en lo que Morejón calificó como “una enciclopedia cubana de las artes cubanas contemporáneas”.
A juicio de la escritora, Belkis Ayón (1967-1999) es “un enigma, una artista de gran talento, una artista no solo ingeniosa, sino que uno de sus de sus aportes fundamental es haber basado su estética en el cultivo de lo que conocemos como grabado”.
Para Morejón, “en el mundo de hoy, hemos rescatado la importancia del grabado como un gran lenguaje del arte contemporáneo; su obra ha sido la prueba”.
El documental incluye “testimonios fundamentales de personalidades extraordinarias, artistas también, que valoran esa zona que yo considero la gran contribución, no la única, pero la gran contribución de patrimonio artístico de este continente y básicamente, de Cuba”, apuntó.
Entre las voces que recuerdan a Belkis en el audiovisual se encuentran Lázara Menéndez, Serafín Quiñones, Cristina Vives-Figueroa, Ángel Ramírez, Eduardo Roca (Choco), Norberto Marrero y José Omar Torres.
Tributos
Cordones-Cook dedicó la premier, en el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA) a la familia Ayón, liderada por Katia Ayón (hermana), fallecida el último día que estábamos filmando, hace tres años.
“Katia fue quien nos abrió muchas puertas, nos puso en contacto con los amigos, los artistas que habían trabajado con Belkis, así pudimos hacer este trabajo”, dijo.
El audiovisual muestra imágenes de su infancia, momentos creativos y exposiciones; los videos revelan a una Belkis creadora, en pleno trabajo de preparación para sus grabados, compartiendo viajes con sus colegas.
Algunos la recuerdan cómo la hija que viajaba y traía materiales de pintura para sus estudiantes; otros dicen que cuando estaba en fase de alguna muestra se quedaba a trabajar por las noches y la encontraban todavía en el taller, al día siguiente; otros recuerdan su alegría y también sus momentos sombríos.
Cordones-Cook hace un acercamiento a su interés por la mitología de la sociedad secreta masculina Abakuá –pese a su secretismo y la prohibición de acceso a las mujeres–, desde su propia representación de Sikán, tras estudiar a profundidad y seriedad esa religión, bebiendo de sus fuentes más auténticas.
A su vez, en voces de personas cercanas, descubre sus temores ante el dibujo y su uso de los colores, así como sus propuestas a organizaciones de la sociedad civil de exposiciones para abrir puertas a los más jóvenes.
Voces fuera del lente
Según la profesora Lázara Menéndez, quien considera a Ayón una mujer muy talentosa, inteligente y estudiosa, el documental cumple una función didáctica e informativa para quienes no conocen a Belkis y su obra; además, apunta a problemas sustantivos en su obra, pero que apenas quedan apuntados.
A su juicio, Ayón fue una mujer que supo elaborar conceptualmente un discurso y representarlo desde el arte visual, con coherencia, intensidad y valentía, lo que merecería mayor profundización.
Por su parte, el pintor y grabador Eduardo Roca (Choco), uno de los protagonistas del documental, elogió la labor de Cordones-Cook, “que siempre está haciendo cosas maravillosas, que dan una fortaleza histórica y humana para Cuba en toda Latinoamérica”.
Consideró el artista que el documental “va a trascender, nos va a fortalecer y todos debemos estar con los ojos bien abiertos, porque esto va a dar mucha luz, alegría y amor para nosotros los latinoamericanos”.
La investigadora Gisela Arandia opinó que la figura de Belkis Ayón trasciende la realidad cubana, en un discurso conceptualmente muy complejo y fuerte, donde no están solo los elementos de religiosidad.
Para Arandia, el documental es un llamado a que “expresemos una serie de elementos de la identidad cubana que no están visibilizados. Eso es lo que sentí, una profunda emoción”.
Sin noticias sobre una eventual transmisión de Belkis Ayón: grabado de desasosiego en la televisión estatal cubana, Morejón indicó que el audiovisual estará en el Centro de Información del MNBA. (2022)