Yaritza Ribot Ávila . Foto: Elder Leyva
Estaba informada de nuestro encuentro. Era mediodía cuando llegué a su oficina en el Tribunal Provincial Popular de Holguín y seguía trabajando, su merecido descanso para el almuerzo podía esperar. Entonces hizo una pausa y me recibió con su rostro tímido y apacible, impactado por la cámara que me acompañaba.
Yaritza Ribot Ávila es Licenciada en Derecho por la Universidad de Camagüey en 1988, natural de Ciego de Ávila. Fue Cupido quien la trajo hasta Holguín. Casada, desde los años universitarios con un holguinero, una vez graduada, decide trasladarse para nuestra provincia, donde ha formado su familia y cosechado infinidad de sueños y logros profesionales.
Primeros años laborales
Con 21 años de edad comenzó a trabajar en la Empresa de calzado Jesús Argüelles de Holguín, donde realizó su servicio social hasta el año 1991. Luego se trasladó a laborar, como especialista, en la Dirección Municipal de la Vivienda en Cacocum.
Aunque confiesa que: “No era mi ambición, ni mi meta ser asesora jurídica. Me tocó como servicio social y lo cumplí de la mejor manera. Mi proyección de futuro siempre fue ser jueza.”
Con la voz quebrada recuerda a su padre, quien también era juez. Llorando explica: “mi padre fue juez durante muchos años y de él heredé esa vocación, lo veía muchas horas dedicadas a esa tarea y así su amor a la profesión me inculcó.”
Cursó y aprobó el diplomado preparatorio para los jueces en 1993. Y hasta la actualidad ya suma más de 30 años en el sistema de tribunales, impartiendo justicia, con el conocimiento legislativo profundo como base de cualquier sentencia firme.
Comenzó a trabajar en el Tribunal Municipal Popular de Holguín como Jueza Profesional. Posteriormente, en el año 1999 fue promovida al Tribunal Provincial Popular de Holguín como Jueza Titular de la Sala de lo Civil y de lo Administrativo y un lustro después fue nombrada Presidenta de esa Sala, puesto que ocupa desde hace 20 años.
Esta Sala se fusionó con otras y en estos momentos es la Presidenta de la Sala de lo Civil, de lo Familiar, de lo Administrativo, de lo Mercantil, del Trabajo y de la Seguridad Social. Al referirme a la magnitud de todas las materias que recoge la sala, ella reflexiona:
“Es una sala de cono