La Fundación Fernando Ortiz abrió este viernes las puertas de su nueva sede, ubicada en una casona colonial en el centro histórico de La Habana, con el objetivo de difundir entre investigadores y público la obra del destacado intelectual cubano, informan medios oficiales de la Isla.
Miguel Barnet, creador y director del centro, afirmó en la ceremonia de apertura que el sitio “ejercerá de manera palpable su rol como centro académico y sus convocatorias establecerán una estrecha relación con San Gerónimo de La Habana y el Instituto Cubano de Antropología“, de acuerdo con un despacho de la agencia Prensa Latina (PL).
El reconocido etnólogo y escritor señaló que entre los propósitos primeros de la Fundación está “contribuir a la difusión del pensamiento contemporáneo cubano y de los estudios relacionados con la cultura nacional, caribeña y latinoamericana“.
Asimismo, enumeró entre sus aspiraciones “ofrecer un espacio que permita el debate e intercambio de especialistas cubanos e internacionales a través de seminarios, conferencias, simposios, cursos, exposiciones, entre otras acciones“, precisa el reporte.
La apertura del lugar, ubicado en el llamado Callejón de Jústiz, reunió al titular del Ministerio de Cultura, Alpidio Alonso, al viceministro de Cultura, Fernando Rojas, y al presidente de Casa de las Américas, Abel Prieto, entre otros funcionarios y creadores.
#Cuba || La Fundación Fernando Ortiz tiene hoy una nueva casa en el centro histórico de La Habana para difundir entre investigadores y público la obra del destacado intelectual de la isla.
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— Prensa Latina (@PrensaLatina_cu) July 1, 2022
La inauguración del nuevo espacio, en el Día del Historiador cubano, devino en “un logro en la difusión y preservación de la cultura que tanto debe agradecer a hombres como Ortiz, Eusebio Leal Spengler y Emilio Roig de Leuchsenring“, apunta PL.
Fundada el 21 de septiembre de 1995, la Fundación Fernando Ortiz emergió como una entidad cultural de carácter público y civil, no gubernamental, sin fines de lucro y dirigida a promover el quehacer del nombrado tercer descubridor de Cuba.
Desde su concepción se centró en el desarrollo de estudios científicos en las áreas de la antropología, la lingüística, la musicología, la religiosidad, y la etnología relacionados con las identidades cubana, caribeña y latinoamericana, recuerda la agencia noticiosa.