Se necesitan micros, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) que aporten establemente a la economía del país, no de supervivencia expresó la doctora Laura Souto Anido, profesora de la Facultad de Economía de la Universidad de la Habana, en el Taller de Acercamiento a estas formas de gestión económica, en la II Jornada Económica Productiva, Cuba 2022, este viernes en la capital.
En tal sentido, actores económicos tanto estatales como privados intercambiaron con expertos en esta esfera sus experiencias y necesidades.
La doctora Natacha Mesa Tejeda, profesora de Derecho de la Universidad de La Habana (UH), aseguró que la apertura de nuevas formas de gestión no estatal permite a cada actor elegir la forma jurídica organizativa que quiere adoptar en su negocio, lo que garantiza diversidad y heterogeneidad del sistema empresarial cubano.
Añadió que, al analizar la cantidad de nuevos actores económicos en la Isla existe una diferencia entre el gran número de Mipymes y las cooperativas no agropecuarias (CNA); a pesar de las facilidades que esta última brinda en materia tributaria, entre otros aspectos.
Esa realidad está marcada en primer lugar por el contexto existente en el momento que se aprobaron la creación de las CNA y la falta de cultura cooperativa en el país.
Por otra parte, la doctora Mesa Tejeda, destacó varios aspectos referentes a las Mipymes que deberías revisarse, como es el caso de examinar el Anexo único del Decreto-Ley 49, que regula las actividades prohibidas a ejercerse por cuenta propia; el diseño relativo a las operaciones de Comercio Exterior, así como crear políticas relativas a la responsabilidad social para todos los actores económicos.
Los actores económicos presentes coincidieron en que existe la necesidad de flexibilizar las normas referentes a la actividad empresarial, pues, no todos operan en las mismas circunstancias y la necesidad de incluir al asesor legal dentro de los empleos de las Mipymes.
La profesora Souto Anido expuso que en la Isla priman las pequeñas empresas y a pesar de la diversidad de sectores que abarcan todavía no existe ninguna que se dedique a la actividad financiera y de seguros.
Uno de los conceptos que siempre se tienen en cuenta al referirse a los actores económicos es el encadenamiento productivo de lo estatal y lo privado, sobre lo cual Rafael Torralbas Ezpeleta, presidente del Parque Científico-Tecnológico de La Habana (3CE), destacó que el centro que dirige como ecosistema de innovación para la ejecución de proyectos de Investigación, desarrollo e innovación (I+D+I) ofrece beneficios e incentivos y facilita mediante su gestión la obtención de resultados de alto impacto.
Argumentó que varias Mipymes incubadas dentro de esta sociedad ya están encadenadas con empresas estatales tanto en asociación como en procesos comerciales.
Como resultado de estos talleres, queda clara la necesidad existente de que se haga funcionar el Instituto de Nuevos Actores, previsto en la Ley, pero aún sin funcionamiento, así como las estructuras que a nivel de territorio y encadenadas con las estrategias nacionales sean capaces de apoyar el crecimiento de los emprendimientos de sus localidades.