El doctor Marlon Ortiz, especialista de segundo grado en Neurocirugía, explicó en el reporte televisivo que al pequeño se le hizo primeramente una descompresión para rodear el foco de fractura, “como está establecido en las técnicas quirúrgicas”, y se le levantó luego el fragmento óseo para poder identificar el fragmento de madera, “que tenía también tierra y fragmentos de metal muy pequeñitos”.
“Todos fueron retirados”, subrayó Ortiz, mientras que su colega, Peggys Oleydis Cruz, también especialista de segundo grado en Neurocirugía, comentó que el pedazo de madera impactó muy cerca del área motora, una zona del cerebro de extremo cuidado por las secuelas que las lesiones pueden producir para la vida posterior del paciente.
“Felizmente se cuidó todo muy bien y hoy el niño está sin secuelas”, destacó la galena.
Aarón tuvo una segunda cirugía en el Juan Manuel Márquez por complicaciones que afloraron en su evolución como un edema cerebral y otras que evidenciaban cierto deterioro del estado neurológico. Sin embargo, de ella también se recuperó satisfactoriamente y hoy se encuentra con buena salud, en rehabilitación.
“Él es un verdadero guerrero desde que nació”, dijo la madre del pequeño. Según explicó, es un niño ochomesino, de 34 semanas, al que dio a luz teniendo la presión arterial sumamente elevada.
La explosión del hotel Saratoga fue causada por una fuga de gas mientras un camión cisterna abastecía la instalación para su reapertura, tras cerca de dos años de cierre por la pandemia de COVID-19.
En el hecho resultaron lesionadas 99 personas, 46 de las cuales fallecieron y 50 recibieron el alta médica. Hospitalizadas permanecen tres víctimas, entre ellas Aarón.