Dos de cada tres estadounidenses se mostró a favor de una posible ley de control de armas más estricta, en Estados Unidos, según reveló una nueva encuesta hecha por de Morning Consult/Politico tras la reciente masacre en Uvalde, Texas, con un saldo hasta ahora de 21 víctimas mortales, entre niños y maestros.
Según nota publicada en Telesur, un 65 por ciento de los votantes respalda dicho paso de acuerdo con el estudio aplicado el miércoles.
Este es el índice más alto de aprobación desde la encuesta posterior al tiroteo de 2018 en la secundaria de Parkland, Florida.
Otra encuesta realizada la semana pasada arrojó que la proporción de republicanos que apoyan el control de armas asciende al 44 por ciento, mientras que dos de cada tres votantes independientes dijeron que quieren leyes de armas más estrictas.
Si bien el instrumento de medición de la opinión pública fue aplicado después del tiroteo del martes, el evento alcanzó gran relevancia, de hecho el 52 por ciento de los votantes dijo que había visto, leído o escuchado «mucho» sobre la masacre y un 36 por ciento que escuchó al menos «algo» al respecto.
Según Telesur, más de un tercio de los votantes (37 por ciento) espera que el Congreso apruebe leyes de control de armas más estrictas durante el próximo año, pues las políticas destinadas a reducir la violencia cuentan con un apoyo amplio y bipartidista dados los tiroteos masivos e incidentes vividos anteriormente.
Los resultados incluso muestran que dos de cada tres votantes apoyarían la prohibición nacional de armas de fuego en escuelas y campus universitarios (66 por ciento), armas de asalto (67 por ciento) y cargadores de municiones de alta capacidad (69 por ciento), incluida aproximadamente la mitad de los republicanos.
Además la mitad del electorado (54 por ciento), impulsado por tres cuartas partes de los republicanos, respaldan el equipamiento de los maestros y el personal escolar con armas de fuego ocultas para responder en caso de tiroteos en las escuelas, como han sugerido varios funcionarios republicanos de Texas.
Corresponde en los próximos días seguir de cerca la sesión legislativa del congreso en a Washington, donde después del receso del Día de los Caídos (30 de mayo), se podría discutir sobre la legislación de control de armas en un nuevo enfrentamiento entre demócratas y los republicanos, opuestos a esta normativa.
Otras heridas detrás de la masacre
Tras el incidente en la escuela de Texas, varios distritos escolares dijeron que aumentarían la presencia policial en los campus esta semana.
Lo mismo sucedió después de los incidentes en la escuela secundaria Columbine (1999), la universidad Virginia Tech (2007), la escuela primaria Sandy Hook (2012) y la secundaria de Parkland (2018). Dichos incidentes resultaron en la muerte de 88 inocentes.
Actualmente son comunes en las escuelas los detectores de metales, las máquinas de rayos X, los guardias armados y el personal al que se permite portar armas.
Además se han se han acostumbrado a planificar en caso de masacres con simulacros que se han implementado en más del 95% de las escuelas primarias de EE.UU., según la organización Everytown for Gun Safety Support Fund.
Everytown asegura que «no hay datos» para respaldar la efectividad de tales ejercicios, todo lo contrario la evidencia sugiere que estos en realidad pueden ser dañinos para la salud mental.
Igualmente fuera de las aulas, un estudio de la Universidad de Stanford determinó que el uso de antidepresivos por parte de jóvenes menores de 20 años aumentó un 21% en las comunidades donde se habían producido tiroteos. Además se percibe un gran impacto económico a medida que las familias abandonan el área donde vivieron el conflicto.
Since a survey conducted after the Buffalo shooting earlier this month, the share of Republicans in favor of tougher gun laws increased from 37% to 44%. https://t.co/sakZLwMhVi #UvaldeMassacre pic.twitter.com/nRpVRzPdqX
— Morning Consult (@MorningConsult) May 27, 2022