Estados Unidos confirmó este jueves que no ha invitado a las dictaduras de Venezuela y Nicaragua a la Cumbre de las Américas el próximo junio en Los Ángeles, mientras fue más ambiguo sobre Cuba al señalar que “todavía” no ha cursado una convocatoria para el régimen comunista, reportó la agencia de noticias EFE.
Kevin O’Reilly, coordinador de la IX Cumbre de las Américas, compareció ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, donde a las preguntas del legislador cubanoamericano Marco Rubio, respondió que ninguno de esos países ha sido invitado por el momento, aunque fue tajante con que ni Venezuela ni Nicaragua serán bienvenidas.
“¿Hemos invitado a alguien del régimen cubano a tomar parte en la cumbre?”, interrogó Rubio. El funcionario del Departamento de Estado contestó que esta decisión corresponde a la Casa Blanca, según informó EFE.
El senador presionó para saber su eso significa que todavía no se ha invitado a La Habana, pero O’Reilly insistió en que se trata de una decisión de la Casa Blanca. Rubio volvió a preguntar si desde allí se ha hecho una convocatoria para Cuba.
“Bajo mi conocimiento, no”, indicó O’Reilly, quien agregó que Estados Unidos invitó a representantes de la sociedad civil cubana. El funcionario explicó que la Administración Biden quiere “tener una amplia participación de la sociedad civil de cada país donde los autoritarios, los dictadores, busquen terminar con el debate público”.
Rubio, senador republicano de la Florida, preguntó si Washington ha invitado a la cumbre al “régimen” de Nicolás Maduro o a cualquiera de sus representantes, ante lo que el coordinador O’Reilly dijo que “absolutamente no”, porque “no los reconocemos como un Gobierno soberano”. También respondió con un “no” rotundo a una cuestión similar sobre invitar a Daniel Ortega u otro representante nicaragüense, según el reporte de EFE.
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, dijo que este viernes definirá si irá a la Cumbre de las Américas. El mandatario dio un espaldarazo a los regímenes autoritarios socialistas, al condicionar su asistencia a que Washington invite a todos los gobiernos de la región, incluyendo a Cuba, Nicaragua y Venezuela. Su postura fue secundada por Bolivia, Guatemala y la Comunidad del Caribe (Caricom), mientras que Argentina, Honduras y Chile han replicado las críticas, aunque asistirán a la reunión.