Borrell celebró el 17 de mayo la decisión de Estados Unidos de flexibilizar su política hacia Cuba y eliminar algunas de las sanciones impuestas en la era de Donald Trump.
“La UE reitera su política de compromiso crítico con Cuba, esperando la aplicación de los pilares del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación, en la que los Derechos Humanos son una parte esencial”, señaló la oficina del alto representante Josep Borrell, en un comunicado.
En el mismo, la diplomacia comunitaria insiste en que la UE continuará respaldando “medidas de apoyo” que mejoren las condiciones de vida de los cubanos.
La decisión de la Administración de Joe Biden se traduce en que se restablecerán los vuelos comerciales fuera de La Habana y aumentarán los servicios consulares y el procesamiento de visas a ciudadanos cubanos, así como de remesas.
Con este paso, Washington revierte algunas de las más de 240 sanciones impuestas durante la era Trump, aunque, según dijo La Habana, estos anuncios no modifican “en lo absoluto” el bloqueo económico a la isla, “ni las medidas principales de cerco económico tomadas por Trump”.
Los representantes por la Florida Marco Rubio (Senado) y María Elvira Salazar (Cámara de Representantes) catalogaron las medidas de “error histórico”.
El congresista republicano Mario Díaz-Balart dijo estar “indignado” porque el actual gobierno de los Estados Unidos “haya decidido debilitar las sanciones y apoyar a la brutal dictadura cubana”.
También tomó partido contra el “deshielo 2.0”, como lo llaman en redes sociales, el senador Bob Menéndez, demócrata por Nueva Jersey y presidente del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta.
“Corremos el riesgo con este anuncio de enviar el mensaje equivocado, a las personas equivocadas, en el momento equivocado y por todas las razones equivocadas”, apuntó Menéndez en un comunicado.
Miembros de la sociedad civil cubana reaccionaron con críticas al anuncio y acusan al presidente Joe Biden de hacer concesiones al régimen comunista de La Habana en medio de una crisis de derechos humanos con cientos de presos políticos por las protestas de julio de 2021.