No se puede dejar de destacar cómo todo el país ha enfrentado esta situación de pandemia, de bloqueo económico, comercial y financiero recrudecido, y de una intensa campaña de demonización de la Revolución Cubana, significó el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en los debates de la comisión de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Para enfrentar la pandemia, actuamos todos desde el alma, por eso tenemos tantas vivencias, precisó.
En este análisis nos tenemos que detener en dos elementos: hay todo un grupo de aprendizajes, y en esos aprendizajes hay elementos positivos, pero también hay debilidades, comentó.
Una de las virtudes del sistema que se montó para detener a la COVID-19 es que se enfocó en protocolos para tratar diferenciadamente a los que estaban convalecientes de la enfermedad.
Refirió que hay problemas de aprendizaje, sobre todo en los niños más pequeños, de menor edad, y que hay atraso en el lenguaje, en la comunicación.
También alertó críticamente que nuestros jóvenes, durante la pandemia, estuvieron más sometidos a horas de televisión y de navegación en las redes digitales, con lo cual estuvieron más expuestos a los contenidos colonizadores y de odio, «y eso es una cosa que debemos diagnosticar».
El Primer Secretario del Partido apuntó que uno de los elementos más afectados en el proceso docente-educativo está relacionado con las habilidades, sobre todo en un grupo de carreras que requieren de la práctica y la presencialidad en clases, y eso también hay que revisitarlo y buscarle soluciones.
CONVERTIR LA CRISIS EN OPORTUNIDADES
Díaz-Canel se refirió a lo positivo que ha sido que el país, en las condiciones actuales, haya podido controlar la pandemia, y eso tiene que ver con el talento, el esfuerzo y la solidaridad de nuestra gente.
Hay que destacar la disposición de los jóvenes, pues cuando íbamos a convocarlos ya lo habían hecho: ya estaban en la zona roja, en las comunidades, atendiendo a personas en situación de vulnerabilidad, afirmó.
Que una juventud, reflexionó, haya actuado con humanismo en esas condiciones, es justo mencionarlo, pues ellos se crecieron, avanzaron cívicamente en nuestra sociedad.
Significó que se rescató la participación en tareas de impacto social, algo que tenemos que mantener por lo que aporta y que ha llevado a conceptos diferentes, pues los jóvenes nos han pedido que sus tesis se las vinculemos a sus barrios, por tanto, desde todas las carreras podemos aportar en tal propósito.
Dijo que se fortaleció la enseñanza a distancia, y la propia vida impuso que teníamos que ir hacia ella de manera más agresiva, pues hace tiempo que la enseñanza tiene sus planes en las plataformas digitales. «Ningún tipo de enseñanza puede quitar a la otra, pero hay que trabajar con alternativas, vincular la presencial y la impartida a distancia».
Insistió en aprovechar las oportunidades que brinda la crisis para innovar y desarrollar, y enfatizó en que se puso a tono un sistema de gobierno en ese sentido, fortaleciéndose la vinculación entre las universidades y los sectores, sistematizándose los espacios de diálogo con los científicos.
Esto nos llevó a crear el Consejo Nacional de Innovación, que ha propiciado un método de trabajo para enfrentar problemas complejos, especificó.
Agregó que ha existido innovación tecnológica y que la mejor expresión son las vacunas, robustas, efectivas. «Después de una movilización masiva como la del 1ro. de Mayo, tenemos los mismos indicadores de la pandemia».
Los parques tecnológicos, las empresas de interfaz, que eran un sueño y se crearon en medio de la pandemia, en medio de las crisis, es otro de los logros, acotó.
También hemos rescatado los conceptos de participación popular, refirió. «A los barrios hemos ido con ese sistema, no de intervención, porque son los vecinos quienes deciden, con la asamblea municipal de apoyo».
A fin de cuenta, si combinamos todos estos aprendizajes, hemos tenido una victoria de la unidad, del heroísmo y de la resistencia creativa presente en nuestro pueblo, concluyó.
El Primer Secretario del Partido recordó la presencia en las redes sociales y la hipocresía que tuvimos que enfrentar de un Gobierno de doble rasero, que negó a la Isla ventiladores pulmonares, oxígeno medicinal e implementó campañas anticubanas como S.O.S. Matanzas, luego el S.O.S. Cuba, pero nuestra gente salió a defenderse. Habría que ver qué sociedad necesita un S.O.S., una sociedad tan quebrada como aquella.
«Hemos tenido un sentido más crítico de los contenidos enajenantes que hay en las redes sociales», puntualizó.
Lissette Martínez Luzardo, diputada por La Habana del Este, significó que en este periodo pudimos demostrar las capacidades que tenemos para el manejo de la crisis. «Tenemos un Gobierno que trabaja para el pueblo».
Los diputados también evaluaron los avances y retos para la implementación del Programa nacional contra el racismo y la discriminación racial.
En la jornada matutina, el mandatario cubano participó en los debates sobre el proyecto de dictamen de Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria y Nutricional, que atendieron, de conjunto, las comisiones de Asuntos Constitucionales y Jurídicos, y Agroalimentaria.