MIAMI, Estados Unidos. — El cubano Héctor Colón, excombatiente del Escambray, es uno de los defensores de la Revolución que ha sufrido el abandono de las autoridades de la Isla.
De extensa trayectoria como miliciano, Colón, residente en la localidad de Birán, todavía está a la espera de una vivienda que le habían asignado hace cinco años, pero que nunca le han entregado.
Eliza Frómeta García, esposa del excombatiente, denunció ante CubaNet que las autoridades alegaron su muerte para justificar la demora en la entrega del inmueble.
Según la mujer, tras ir a La Habana, a la cabecera provincial de Holguín y al gobierno del municipio de Cueto, las autoridades finalmente dieron respuesta al caso de su esposo.
“Dicen que pensaban que estaba muerto. Cómo van a saber si está muerto si nunca han venido ni a visitarlo”, declaró la mujer a este diario.
Eliza Frómeta señaló que a pesar de los problemas de salud que enfrenta su esposo —ya ha sido sometido a tres operaciones —, este puede caminar y bañarse por sí mismo, así como comer y tomar agua sin dificultades.
La mujer señala que Héctor Colón combatió contra los guerrilleros anticastristas en el Escambray a inicios de los años sesenta del pasado siglo, y que durante la invasión de Bahía de Cochinos fue movilizado en Banes.
Héctor Colón y su esposa, Eliza Frómeta, habitan una vivienda de madera, con piso hecho del mismo material, en el medio del monte.
La familia dice sentirse engañada por el Estado, en especial Héctor, quien sufre haber entregado su juventud a la Revolución para luego ser abandonado.
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