Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, Argentina. Foto: El cronista.
La edición 46 de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, uno de los mayores eventos literarios de Hispanoamérica, abrió sus puertas en la capital argentina con La Habana como Ciudad Invitada de Honor.
Tras dos años de interrupción, el espacio expositivo La Rural acogerá la esperada fiesta de las letras hasta el 16 de mayo.
Organizada por la Fundación El Libro, la cita contará con la participación de expositores de más de 40 países e incluirá numerosas actividades culturales.
En esta ocasión, la literatura, el cine, la música y la artesanía cubana engalanarán la Feria de Buenos Aires.
Durante casi tres semanas, el espacio expositivo espera la visita de más de un millón de lectores y 12 000 profesionales.
La delegación de Cuba está integrada por el ministro de Cultura Alpidio Alonso, y el presidente de la Casa de las Américas, Abel Prieto.
Los acompañan, el dramaturgo Antonio Rodríguez, la escritora argentina radicada en la Isla, Basilia Papastamatíu, el ensayista e investigador Enrique Ubieta, y los poetas Víctor Casaus y Nancy Morejón.
La Feria del Libro de Buenos Aires se realizó por primera vez en 1975.
El evento alcanza gran relevancia en el campo editorial y de la promoción del arte y la literatura.
Con casi tres décadas en su historial, la Feria de Buenos Aires es considerada uno de los eventos de su tipo más relevantes de Argentina.
Las jornadas están dedicadas al intercambio y capacitación de profesionales del sector.
El programa incluye conferencias, presentaciones de libros, cursos, charlas, festivales de poesía, diálogos entre narradores y una jornada de microficción.
Esta semana trascendió las palabras del Ministro de Cultura, Tristán Bauer, agradeciendo a La Habana por aceptar la invitación.
“Figura que une a nuestros pueblos a través de la prédica por el mejoramiento humano”, señaló el funcionario argentino.
Durante la inauguración, el titular resaltó su importancia como espacio que une a profesionales y al público y sostiene la pasión de leer.
“Los libros no puede ser objeto de lujo. Aspiramos a que cada niño se encuentre con ellos”, expresó más adelantes.
(Con información de Cartelera)
