Los funcionarios de la administración de Biden presentaron el martes su plan para reforzar la frontera y la inmigración a medida que se reduce una excepción de seguridad fronteriza relacionada con la pandemia conocida como el Titulo 42.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, publicó el martes un memorando de 20 páginas que detalla cómo la administración pretende evitar que el cambio en la política fronteriza provoque el desorden.
El memorando describe un plan de trabajo sobre cómo hacer cumplir la ley de inmigración de EE. UU. sin el poder legal adicional para expulsar de inmediato a los migrantes que se encuentren en la frontera que el Título 42 otorgó a los funcionarios.
El plan de la administración se divide en seis «pilares de seguridad fronteriza», que abarcan todo, desde aumentos repentinos de personal y recursos a corto plazo en la frontera hasta un programa para disuadir la migración desde América Latina.
Un elemento clave del plan es la intención de aumentar las consecuencias legales de los cruces fronterizos no autorizados, un elemento de disuasión que se redujo bajo el Título 42.
“El núcleo de este plan es nuestro compromiso de continuar aplicando estrictamente nuestras leyes de inmigración”, dice el memorando de Mayorkas.
“Esto incluye un mayor uso de la Expulsión Acelerada, la detención de adultos solteros cuando corresponda, la derivación para enjuiciamiento de aquellos cuya conducta lo justifica y la aceleración de las adjudicaciones de asilo que nos permiten procesar y expulsar más rápidamente de los Estados Unidos a quienes no califican para el alivio bajo nuestro leyes”, agrega.
El memorando de Mayorkas proyecta un enfoque en la aplicación estricta, en particular el uso de deportaciones aceleradas, al tiempo que amplía el potencial para procesar las solicitudes de asilo.
La ley de inmigración permite a los funcionarios de EE. UU. repatriar sumariamente a muchos migrantes que no pueden presentar una solicitud de asilo, han cruzado la frontera de manera subrepticia y son atrapados dentro de las 100 millas de la frontera y dentro de los 14 días de haber ingresado al país.
Al igual que el Título 42, las deportaciones aceleradas requieren menos recursos para expulsar a más personas, pero a diferencia del Título 42, los migrantes pueden ejercer su derecho a solicitar asilo en el proceso acelerado.
Al igual que la administración Trump antes que ella, la administración Biden ha insistido en que el Título 42 era exclusivamente una política de salud pública, y su cumplimiento continuo está sujeto a las determinaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El lunes, un juez de Luisiana impidió temporalmente que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) implementara su plan para reducir el Título 42, pero la determinación de salud pública de los CDC no estaba sujeta a las mismas regulaciones administrativas que el DHS.
