Los organizadores de Wimbledon, tercer Grand Slam de la temporada, que se disputará este año del 27 de junio al 10 de julio, informaron este miércoles sobre el veto a los tenistas rusos y bielorrusos por la operación militar de Rusia en Ucrania.
“Es nuestra intención, con profundo pesar, rechazar las entradas de jugadores rusos y bielorrusos en 2022”, dijeron los organizadores en un comunicado.
“Hemos considerado cuidadosamente la situación en el contexto de nuestros deberes para con los jugadores, nuestra comunidad y el público más amplio del Reino Unido como institución deportiva británica. También hemos tenido en cuenta la orientación establecida por el Gobierno del Reino Unido específicamente en relación con los organismos y eventos deportivos”, añadieron.
En este sentido, dado su importancia en el país “y en todo el mundo”, el All England Club cree que tiene la “responsabilidad” de continuar “los esfuerzos generalizados del Gobierno, la industria, las instituciones deportivas y de ocio para limitar la influencia global de Rusia a través de los medios más fuertes posibles”, se lee en el comunicado.
Tras esa decisión, el tercer Grand Slam de la temporada no podrá contar con algunas de las figuras del ranking mundial de la ATP y la WTA como los rusos Daniil Medvedev, actual número dos del mundo, y Andrey Rublev, octavo, y la bielorrusa Aryna Sabalenka, número cuatro del circuito femenino.
Poco después, la ATP, Asociación de Profesionales del Tenis, se mostró en contra de una “decisión unilateral e injusta”.
“Nuestro deporte se enorgullece de operar sobre los principios fundamentales de mérito y equidad, donde los jugadores compiten individualmente para ganar su lugar en los torneos basados en el ranking ATP. Creemos que la decisión unilateral de Wimbledon y la LTA de excluir a los jugadores de Rusia y Bielorrusia de la gira sobre césped británico de este año es injusta y tiene el potencial de sentar un precedente dañino para el juego”, señaló la entidad.
“La discriminación basada en la nacionalidad también constituye una violación de nuestro acuerdo con Wimbledon, que establece que la entrada de jugadores se basa únicamente en las clasificaciones ATP. Cualquier acción en respuesta a esta decisión ahora se evaluará en consulta con nuestra junta y los consejos de miembros”, añadió.
La WTA, la Asociación Femenina, publicó otro comunicado contra la decisión tomada por el “grande” inglés y la Asociación británica.
“Estamos muy decepcionados. Un principio fundamental de la WTA es que los atletas individuales pueden participar en eventos de tenis profesional en función del mérito y sin ningún tipo de discriminación”, afirmó la organización.
“Ese principio está expresamente establecido en nuestras reglas y ha sido acordado tanto por AELTC como por LTA. Las prohibiciones contra la discriminación también están claramente expresadas en sus propias reglas y en las reglas del Grand Slam.
“Como la WTA ha declarado consistentemente, los atletas individuales no deben ser penalizados debido a su lugar de origen o las decisiones tomadas por los Gobiernos de sus países”, agregó.