Continuar potenciando su desarrollo constituye la principal aspiración para toda la cadena de la miel y otros productos de la colmena.
Tras haber alcanzado las mayores producciones de la historia en varios rubros, los apicultores siguen pensando en progresar y abrirse caminos propios en los mercados de exportación para que la miel de la Isla pueda mostrar qué es y de dónde viene, además de fomentar otros productos de la colmena, según refleja el semanario Opciones.
De acuerdo con información ofrecida por Lázaro Bruno García Castro, director general de la Empresa Apícola Cubana, Apicuba, en 2021 se produjo la mayor cifra de miel de la historia: más de 10 500 toneladas (t) -el récord anterior databa de 1962, con 10 215 t-, y más de 174 t de cera, la cuarta mayor cifra de la historia de la apicultura.
En ese periodo, además, el sector alcanzó más de 16 toneladas de propóleos, y existe el propósito de apostar por el polen, del cual se obtuvieron ocho toneladas.
También son favorables el número de colmenas, que rebasan las 220 000, así como la producción de abejas reina, ascendente a 222 000.
Con 48 kilogramos por colmena, los rendimientos exhiben una cifra elevada. En la etapa se exportaron más de 8 500 toneladas de miel.
La Empresa tiene la aspiración de incrementar los niveles de venta en el país, que en 2021 ascendió a más de 700 toneladas, gracias a la creación de una red de tiendas.
Son resultados muy positivos si se tiene en cuenta el contexto de la COVID-19 y la ocurrencia de tres eventos meteorológicos.
El Estado cubano adoptó un grupo de medidas para favorecer el sector no estatal y dinamizar la actividad agropecuaria, como aprobar la capacidad de exportación e importación concedida a la empresa y el retorno del 80 % de la divisa obtenida para el propio desarrollo.
La miel cubana está presente en el mercado europeo desde hace más de 30 años, y una de las estrategias es que se reconozca la marca Apisun y el origen cubano dentro de las mezclas que hoy comercializan los envasadores europeos a los que Apicuba exporta sus productos.
Otro objetivo es acrecentar el valor agregado bruto a las mieles y explotar los demás productos de la colmena: el propóleo, el polen y el veneno.