El prisionero político Luis Robles Elizástegui, detenido en 2020 por manifestarse en solitario con un cartel en el Boulevard de San Rafael, en La Habana, continúa sometido a interrogatorios y presiones por parte de la Seguridad del Estado, denunció a Radio Martí su hermano, Landy Fernández, quien pudo visitarle en prisión el pasado 24 de febrero.
Robles contó a su hermano que los carceleros “lo despiertan por la madrugada, lo llevan para una celda de esas, donde lo interrogan; lo encadenan ahí con las esposas esas, lo dejan ahí unas cuantas horas, solo, y luego vienen y le hacen 20 preguntas absurdas que él no tiene cómo saber la respuesta”.
Durante los interrogatorios nocturnos, le preguntan a Robles “si él conoce algún que otro opositor, si sabe de alguna manifestación que se va a hacer en X lugar. Él está en la celda”, reflexiona Fernández, “realmente, Luis no tiene cómo saberlo porque, desgraciadamente, lleva un año allá adentro, y la otra es que él no tiene vínculo con ningún opositor”.
Esta situación tiene al prisionero político “muy preocupado y afligido, y con la alergia esa, producto del mismo estrés”, añadió el hermano.
“Luis es alérgico y, entonces, el mismo estrés le produce como una alergia que le despelleja todo el rostro, y le salen unas erupciones que se pone realmente horrible. Bueno, cuando fui, estaba con esa alergia”, aseguró Fernández.
Comentó, además, que la madre de ambos fue a Cuba a principios de mes y también lo pudo visitar. La señora también acudió al Tribunal Municipal.
“La presidenta del Tribunal ese fue la que estuvo presente en el juicio que le hicieron a Luis, y nada, le dijeron que todavía, que había que esperar la sentencia a causa de unos ‘modelos’ y que posiblemente, saliera a final de mes y, bueno, nada, seguir esperando”, concluyó Fernández.
Luis Robles Elizástegui, quien se encuentra en la prisión de máxima seguridad Cominado del Este, en La Habana, fue juzgado el 16 de diciembre de 2021 en el Tribunal Municipal de Marianao, el cual ratificó la petición fiscal de 6 años de privación de libertad con internamiento, pero aún no ha recibido la notificación de sentencia firme.
El joven, de 29 años, no estaba afiliado a ningún grupo opositor. El cartel que portaba en el momento de su arresto pedía “libertad”, “no más represión” y “liberen a Denis”, en referencia a Denis Solís, rapero encarcelado en esos días por el régimen.
