La producción a escala industrial del primer lote de producción nacional de gabinetes semafóricos, cajas de control y tarjetas semafóricas que permitan alcanzar la soberanía tecnológica en este renglón, el ahorro considerable de divisas y una vez consolidada la misma, desarrollar los radares de velocidad y los etilómetros, se encuentra entre lo previsto para el segundo semestre de 2022 por la Comisión Nacional de Seguridad Vial (CNSV).
En declaraciones a Granma, Reinaldo Becerra Acosta, secretario de la CNSV, comentó que esto es una novedad como parte de las acciones para reducir los niveles de accidentalidad y sus consecuencias, y contribuir con ello al ordenamiento vial.
Entre otras medidas, también se intensificarán aquellas que permitan mantener niveles adecuados de señalización vial en las zonas de desarrollo económico, polos turísticos, así como vías de mayor peligrosidad y desplazamiento, haciendo un uso más racional de los limitados recursos.
Becerra Acosta añadió que el trabajo también se centrará en incrementar, de conjunto con el resto de los órganos de inspección del Ministerio del Transporte (Mitrans), la participación en los controles a las principales bases de transporte de carga o pasajeros que permitan detectar los problemas de conductores y vehículos antes de salir a la vía pública.
En 2021, a pesar de las limitaciones, ingeniería de tránsito marcó 2 046 kilómemtros de vía entre eje, borde y carril, básicamente en zonas urbanas, lo que representó el 55,7 %. También colocaron y pintaron 1 812 múcuras (elemento de forma hemiesferoidal utilizado en la canalización del tránsito y empleado como sustituto de los contenes).
De igual forma, se instalaron 4 391 pedestales y otros 19 895 fueron reparados y pintados y se prioriza el mantenimiento de las señales, lográndose recuperar el 72,8 % del total instaladas.
En Cuba, a pesar de los 8 369 accidentes de tránsito reportados el año pasado, se mantiene la tendencia a la disminución de los mismos iniciada hace diez años.