MADRID, España.- En el mes de febrero de 2022 ocurrieron en Cuba 207 manifestaciones públicas contra el régimen, informó el Observatorio Cubano de Conflictos (OCC).
De las 207 protestas, 130 (63%) estuvieron relacionadas con motivos políticos y civiles; la mayoría se debieron a los abusos, arbitrariedades judiciales y condenas a manifestantes pacíficos del 11 de julio, así como a las torturas y maltratos en las cárceles, precisó el OCC en su reporte mensual.
Mientras que por razones económicas y sociales se registraron 77 (37%), motivadas fundamentalmente por el desabastecimiento de productos básicos como la leche, los abusos de derechos laborales, el rechazo a las tiendas de ventas en MLC (Moneda Libremente Convertible) y la inseguridad ciudadana.
Las 207 manifestaciones sucedidas en febrero son prácticamente equivalentes a las 203 que se produjeron en abril de 2021, tres meses antes del 11J, apunta OCC.
De acuerdo al OCC, encargado de medir la conflictividad nacional y el modo en que su agravamiento incide en la gobernabilidad del país, como en meses anteriores, las manifestaciones se caracterizaron por un estilo de guerrilla (individual o en grupos de dos o tres personas) no violenta.
En ese sentido, citó ejemplos como las pintadas contra el mandatario Miguel Díaz-Canel y su gobierno, la distribución de materiales informativos por aplicaciones digitales o la denuncia a la represión a través de redes sociales.
Sobre este último, se refirió a las campañas por la liberación de los presos políticos y de los menores encarcelados; el No al Código Penal; el desacuerdo con la tiendas en MLC y, a finales de mes, en solidaridad con Ucrania.
El Observatorio Cubano de Conflictos se refirió además a la estrategia gubernamental de “Gran Terror” para poner fin a las protestas.
“Dicha estrategia de represión integral concertada (policía, Seguridad del Estado -G2-, fiscalía, jueces, funcionarios de inmigración, de relaciones exteriores, medios oficiales, grupos paramilitares y de vigilancia) ha desnudado la indefensión legal ciudadana, deslegitimando así las expectativas de una mejor protección de los Derechos Humanos que habían sido sembradas por la nueva Constitución. Cuba sigue siendo un gigantesco estado policiaco en una isla-cárcel”, se lee en el documento.
Al respecto, el reporte menciona las torturas en las prisiones y las sentencias de hasta 20 años de prisión bajo falsos delitos de desorden público, desacato, atentado, sedición, instigación a delinquir, propagación de epidemias, resistencia y sabotaje a decenas de acusados por los sucesos del 11 de julio.
Así como denunció que se aceleraron los procesos de adopción de nuevas regulaciones legales que endurecen el código penal y el poder del Estado ante los menores de edad (Código de Familia) para “normalizar” el retiro de la patria potestad a los disidentes con hijos menores de edad.
En sus estudios mensuales, el OCC evalúa un grupo de factores que reflejan el índice de estabilidad de la sociedad en su conjunto como son el grado de insatisfacción o violación de derechos no solo políticos y civiles sino económicos, sociales y culturales.
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