El poeta que aspiró a que un día se hablara en la Isla del «color cubano» –luego de que se desterraran para siempre prejuicios y actitudes vergonzosas, enraizadas en seres que discriminan a sus semejantes por tonalidades de la piel, entre otros rasgos étnicos–, llegó al mundo el 10 de julio de 1902, hará pronto 120 años.
En un prólogo maestro, el que acompaña a uno de sus más encumbrados poemarios, el joven Nicolás Guillén –29 años tenía cuando se publica Sóngoro Cosongo– dejaba constancia de saber que aquellos versos donde se privilegiaba al negro del pueblo provocarían grandes revuelos. (No olvidemos que en 2018 el diario español ABC lo seleccionó entre los cien mejores libros de la literatura universal).
Convencido de que «una poesía criolla entre nosotros no lo será de un modo cabal con olvido del negro», que «aporta esencias muy firmes a nuestro coctel (…)», aseveró que «el espíritu de Cuba es mestizo». Y vaticinó que «del espíritu hacia la piel nos vendrá el color definitivo».
Consciente de que llegaría el día en que «color cubano» sería la denominación con que nos referiríamos todos a nuestra sa(n)grada mezcla, quiso que aquellos poemas se adelantaran a ese día.
El 1ro. de enero de 1959 fue la aurora de ese sueño, pero no bastaba con el triunfo revolucionario. Había que emprender una ingente batalla –que sin detenerse aún no termina– para hermanar, tras siglos de obcecaciones, a todos los hombres. Tal es la virtud del Poeta Nacional, como si no bastara la luz y el conocimiento que transpira su elevada poesía, que Color Cubano es el lema que ondea el Programa Nacional contra el Racismo y la Discriminación Racial.
El autor de Motivos de son y El son entero será homenajeado a lo largo y ancho de la Isla durante todo el año. Para ello, la Fundación Nicolás Guillén ha organizado un programa de actividades desde las que el poeta será evocado en tanto se celebre la fuerza de su vida y su palabra, enriquecedora del acervo intelectual cubano.
Para acercarnos al Guillén de carne y hueso, y conseguir que, junto a los conocedores de su obra, las jóvenes generaciones se acerquen a él, la fundación organizó un concurso de ensayo, dirigido a estudiantes de todas las universidades del país.
Pero sin duda, la más importante de las acciones será la décimo tercera edición del Coloquio y Festival Nicolás Guillén, que también rinde honor a los 50 años de publicados La rueda dentada y El Diario que a Diario y a los 80 años de la visita del poeta a Haití. Camagüey, su tierra natal, acoge la celebración del coloquio, del 7 al 10 de julio de 2022.
Mientras la fecha llega, la figura de Guillén ocupará –por solo citar algunas de las propuestas– el centro de exposiciones fotográficas (Yo no soy un hombre puro); serán presentados en la Feria del Libro títulos con sello de Ediciones Sensemayá; la Fiesta de raíces y tradiciones, en Las Tunas, le estará dedicada y también en esta provincia tendrá lugar el encuentro de trovadores cantando a Guillén.