Super KO, lechada, extrainning, KO y hasta tripleplay en arranque de la pelota

Después de la jornada de apertura, con un cerrado duelo entre el campeón defensor, Granma, y el subtitular de la pasada campaña, Matanzas, ya los 16 equipos de la 61 Serie Nacional se estrenaron en el terreno. Ese debut de todas plantillas trajo una primera jornada intensa, con cotas de todo tipo, lo mismo desde el montículo que con el madero en ristre.

A nuestro modo de ver, y por lo que siempre se extraña unos nueve ceros en el pitcheo, Yander Guevara fue el gran protagonista de este martes, al dejar sin carreras, en siete y dos tercios de entradas, nada menos que a uno de los grandes aspirantes al título: los Leñadores de Las Tunas. En el orden colectivo, nada se pareció a la despiadada ofensiva matancera frente a Cienfuegos, pues los Cocodrilos, que ganaron su segundo juego en línea, protagonizaron el primer Súper KO de la temporada, al fabricar 20 carreras y pegar la friolera de 21 jits en solo cinco episodios.

En la propia jornada llegó el primer extrainning de la campaña, en el cual Artemisa en venció a Industriales en 11 capítulos, en choque en el cual también llegó el primer tripleplay de la justa, luego de una línea de Yasiel Santoya con hombres en primera y segunda, y el juego a favor de los azules por 1-0 en la escena inicial. También tuvimos el primer KO, obra de los aguijones de las Avispas santiagueras a los Cachorros de Holguín.

No se puede decir que los tuneros fuero silenciados por las serpentinas de Yander Guevara, pues le pegaron 11 indiscutibles, pero el derecho avileño contó con el arma principal de un lanzador ante un conjunto tan bateador: el control, pues en esos mismo siete y dos tercios de innings, no llevó a nadie a circulación ni por boleto ni por pelotazo. Esa fue la clave de su éxito, y de la cual se colgaron sus Tigres, que solo pudieron acreditarse seis jits.

En el Victoria de Girón yumurino, las fieras del pantano les cayeron a mordidas a los Elefantes cienfuegueros desde el capítulo inicial, con 11 anotaciones y con diez de los 21 inatrapables que dieron en el partido. De la decena de incogibles, siete fueron extrabases: cuatro dobles y tres jonrones. Luego volvieron a atacar en el tercero, con ocho imparables, entre los que sobresalieron otros trs biangulares y un cuadrangular.

Aunque el despiadado castigo recibido por los paquidermos es una exageración, lo cierto es que al revisar las nóminas se sabía que, en un paralelo con la Grecia antigua, los de la Atenas de Cuba tienen la más espartanas de las ofensivas de la 61 Serie Nacional. Y, al parecer, esta pudiera ser una tónica de la ruta yumurina, al decir de su propio mentor, Armando Ferrer, quien nos dijo antes de arrancar la lid que cada desafío cuenta, porque el campeonato se gana todos los días, no en la última fecha.

En el extremo más occidental, si bien no hubo un nueve ceros y el rival no eran los Leñadores, sino los Piratas de la Isla de la Juventud, Yosvani Torres tuvo un paso de lujo por la lomita de Pinar del Río. A él tampoco le pisaron el home en seis actos y, como Yander Guevara, no transfirió a ningún adversario, en tanto solo permitió dos jits. Así como es temida la mandíbula ofensiva de los Cocodrilos, ojo con el tabaco de los Vegueros que quema parejo desde los brazos de sus serpentineros.

En un juego en el que los Leones de Industriales siempre estuvieron delante en el marcador, los Cazadores de Artemisa, flecha a flecha, los engarzaron. En el noveno inning, perdiendo por una, y con la inicial y la intermedia ocupadas, el alto mando de la capital ordenó bolear intencionalmente a Dayán García, el mejor bateador artemiseño, para trabajar a José Jiménez, quien había sido dominado en sus cuatro turnos anteriores. Nada que objetarle al mentor Guillermo Carmona en esa decisión, aun cuando sobrevino el jit que le empató el marcador. Los dos planteles con la regla Schiller anotaron una en la décima entrada, pero los felinos no lo hicieron en la oncena, dejándole la escena lista a Carlos Yoel Amat para pegar, en su primera vez en la caja de bateo, el jit que tendió en el campo a los capitalinos.

Solo un paréntesis, esa fue la escena final, pero lo cierto es que a Industriales el choque se les complicó no por esa jugada, sino porque sus cuatros errores le costaron cinco de las ocho que permitieron sus lanzadores.

Villa Clara perdía en Mayabeque por 4-1, pero en el llamado episodio de la suerte, el séptimo, armaron un paquete de cuatro registros, con igual cantidad de jits, para irse arriba por la mínima. Pero los Vaqueros tuvieron la misma suerte en esa entrada, entre otras cosas por una jugada muy similar a la que le costó el juego a Industriales, y que también fue una decisión acertada.

Con dos en bases y la primera desocupada apareció en el home la figura del hombre más peligroso de la ofensiva mayabequense, Denis Laza, y sin pensarlo, Pedro Jova, al frente del alto mando naranja, lo mandó intencionalmente hacia primera. Aunque Yasniel González no es un desconocido, por eso es el cuarto madero en la tropa del director Michel González, la jugada también se caía de la mata. Yasniel no había pegado jits en tres turnos, pero dio el decisivo para empujar las dos que definieron el marcador final.

Ángel Luis Márquez estaba pintando de blanco a Sancti Spíritus por 2-0 hasta el quinto acto, en el cual los Gallos se montaron arriba de los Toros camagüeyanos para picarlos en nueve oportunidades entre el sexto y el octavo innings y redondear pizarra ganadora de 9-2, con un Yanquiel Mauri efectivo en la tabla de lanzar durante seis completos, con cuatro ponches sin boletos y cuatro jits permitidos. Mientras, Daviel Gómez, Yunbier Mendoza, Frederich Cepeda y Alberto Rodríguez, los cuatro primeros bates de la alineación yayabera aportaban siete de los 13 indiscutibles de su equipo e impulsaban siete de las nueve anotaciones.

En Holguín, las Avispas clavaron fuertes sus aguijones, con un Yoelkis Guibert, en la tercera plaza de la alineación, bateando de 4-3, con doble y triple incluidos, tres anotadas y una remolcada. Con él emuló el inicialista Erick Serrano, con igual saldo ofensivo, pero con dos empujadas y una registrada en home. A pesar de sus cuatro boletos en cinco entradas, Carlos Font asmió su papel de líder del pitcjheo santiaguero y cumplió en cinco completos, tolerando tres imparables, dos limpias y ponchando a tres.

Y los Alazanes granmenses resolvieron su pleito ante los guantanameros en el sexto con racimo de tres carreras, en la que mucho tuvo que ver el jonrón con uno a bordo de su receptor Iván Prieto y el buen desempeño de Joel Mojena, en calidad de abridor, con una limpia en siete completas, cinco ponches, un base por bolas y nueve incogibles aceptados.

Hoy regresan los mismos cotejos en los mismos escenarios, lo que habría que ver si serían las mismas historias.

Primera subserie

25 enero 2022