El año 2022 no presenta el habitual calendario de eventos internacionales para el boxeo cubano, pues no será época de Juegos Olímpicos, Panamericanos, Centroamericanos y del Caribe, ni Campeonato Mundial.
Ante semejante realidad la Federación Cubana de Boxeo debe diseñar un cronograma competitivo internacional que le permita a la selección cubana conservar el excelente estado físico que mostraron en 2021 de cara a 2023, cuando se disputarán Panamericanos, Centroamericanos y Mundial.
Por supuesto, no faltarán ofertas para asistir a varios eventos foráneos. La calidad del pelador cubano es incuestionable y contar con un conjunto de la Mayor de las Antillas le da garantías de prestigio a cualquier velada boxística.
Desde hace algún tiempo se valora la posibilidad de insertar a los miembros de la selección nacional en circuitos profesionales, como un paso necesario, atendiendo a que eventos regulares como la Serie Mundial de Boxeo dejaron de existir, lo que genera un vacío competitivo que no ha sido llenado.
De materializarse esta aspiración, los hombres de mayor experiencia en la escuadra nacional tendrán una motivación adicional para continuar extendiendo su trayectoria deportiva. Además, los peleadores de menor recorrido internacional en la preselección podrán asumir otros torneos que, hasta ahora, eran encarados casi siempre por las primeras figuras de la escuadra.
Mantener compitiendo a buena parte de los casi 40 boxeadores que forman parte de la preselección nacional incrementará la calidad de todos ellos y profundizará la necesaria rivalidad deportiva para ser el hombre elegido de cara a unos Juegos Olímpicos o un Campeonato Mundial.
Un detalle que no se puede perder de vista es creer que todo duelo ante un púgil profesional es sinónimo que se compite contra un deportista de sobrada calidad. Como en todo deporte hay excelentes, buenos y mediocres adversarios.
Por ello se deben analizar primero la viabilidad de cada escenario a donde se va a acudir para luego determinar con cuáles boxeadores se realizará el viaje. También Cuba puede ser el anfitrión de carteleras boxísticas que serían del agrado de la afición deportiva.
La ventana de combatir ante profesionales se debe encarar con inteligencia, aplicando una correcta rotación de boxeadores, sin descuidar el escenario de los juegos múltiples, pues a fin de cuentas un título olímpico marca la gloria en una carrera deportiva.