«La reunificación de las Esculturas del Partenón no es una cuestión de distancia porque, bien sea que se encuentren aquí en Atenas o en cualquier otra parte del mundo, su destino solo puede ser la Roca Sagrada (la Acrópolis) y este gran museo», señaló el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis con motivo del regreso de diez fragmentos al Museo de la Acrópolis.
De acuerdo con DW, Mitsotakis insistió además en que el regreso de las piezas que se encuentran en el Museo Británico es una solicitud de la Unesco y de la mayor parte de la opinión pública también en esa nación.
Con respecto a la posición del primer ministro británico, Boris Johnson, ante dicha petición, su homólogo griego recalcó que «habiendo él mismo recibido estudios clásicos y siendo un aficionado de la antigua Grecia, estoy seguro de que no bloqueará ningún posible acuerdo futuro, levantando cualquier posible obstrucción política (…) Si es necesario modificando la ley británica sobre museos para facilitar la reunificación de las esculturas del Partenón», añadió.
Las piezas del Partenón que expone hoy el Museo Británico llegaron a esa nación a comienzos del siglo XIX, cuando el embajador británico del Imperio Otomano, Thomas Bruce, que se definía como un amante de las antigüedades, consiguió llevarse parte de las metopas y del friso interior del Partenón. Luego las vendió a su Gobierno por 35 000 libras, de ahí que el Museo de la Acrópolis solo exhibe copias.
En la información publicada por DW, se destaca que los fragmentos instalados hoy, hasta ahora conservados en el Museo Arqueológico Nacional en Atenas, proceden del frisio, las metopas y los frontones del Partenón. Entre ellos se encuentra la parte superior de una cabeza joven, que está conectada con la figura del segundo supervisor izquierdo de la procesión Panatenaica, representada en la piedra VII del friso oriental y se trata del único fragmento de la piedra auténtica en el Museo de la Acrópolis, ya que el resto está en el Museo del Louvre, en París.
Lina Mendoni, ministra griega de Cultura, quien estuvo presente en el acto, afirmó que el retorno de las piezas es «absolutamente imprescindible», como parte de la lucha de ese país por la repatriación de todas las esculturas del Partenón.