Con la arrancada este jueves del central Melanio Hernández la provincia estrena la cosecha que estará marcada por la operación escalonada de las dos industrias y la baja disponibilidad de caña
El central de Tuinucú comienza la zafra en la fecha programada y planifica 34 días de campaña. (Foto: Reidel Gallo/Escambray)
Sancti Spíritus inició la zafra con la arrancada este jueves del central Melanio Hernández, industria que tiene planificado un calendario de 34 jornadas de operaciones a partir de la estrategia de escalonar la cosecha para buscar un mejor aprovechamiento de la capacidad de molida utilizando parte del dispositivo de corte del Uruguay, ingenio que debe comenzar la contienda a inicios de febrero.
Antonio Viamontes Perdomo, director de la Empresa Agroindustrial Azucarera Melanio Hernández, informó a Escambray que la cosecha está abierta en las diferentes zonas de corte, con la incorporación del grueso del dispositivo mecanizado y el engranaje del ferrocarril para hacer llegar la caña al basculador.
Subraya Viamontes Perdomo que el punto más sensible de la arrancada de la cosecha se localiza en la baja incorporación del parque de camiones previsto en el balance de tiro, ante las limitaciones con los neumáticos y las baterías.
“Es un comienzo muy tenso por esa baja disponibilidad de los camiones porque son imprescindibles para el movimiento de la materia prima del campo hacia los centros de limpieza; esperamos que gradualmente se puedan incorporar más equipos para respaldar el corte de caña que ha comenzado según la estrategia prevista y uno de los pelotones del Uruguay distingue entre los que mejor se ha comportado en este inicio”, detalló Viamontes Perdomo. La puesta en marcha del central transita por un breve período de ajuste y molida limitada, para dar paso al funcionamiento planificado que tiene en el aprovechamiento de la capacidad al 75 por ciento su objetivo principal, de lo cual dependerá mucho la eficiencia y la fabricación de azúcar.
Para el central de Tuinucú representa la zafra más corta de su historia, no obstante se concibe la entrega de vapor a la Destilería aledaña y ensacar alrededor del 80 por ciento del azúcar a producir para asegurar la canasta básica y cubrir otros destinos.
El hecho de programar la zafra de forma escalonada dará la posibilidad de integrar mejor el balance de equipos, de ahí la importancia de su completamiento para lograr un mejor aprovechamiento de la norma potencial de molida; aunque al ser menor la disponibilidad de materia prima la producción de azúcar disminuirá con respecto a la anterior contienda.
