BAYAMO, Granma.– La Empresa Laboratorio Farmacéutico de Líquidos Orales, Medilip, enclavada en esta oriental provincia –y única de su tipo en el país– inició recientemente la producción a escala industrial del Curmeric, un fármaco natural que, aún en fase de estudio, se emplea en investigaciones clínicas anti-COVID-19.
De acuerdo con una publicación en la cuenta de Facebook de esta prestigiosa entidad adscripta al grupo de BioCubaFarma, la elaboración del novedoso producto se realiza en forma de gotas nasales, solución oral y colutorio (enjuague bucal), tras la realización de estudios preclínicos que han demostrado su actividad antiviral y antibacteriana en infecciones del sistema respiratorio.
Por su parte, la doctora en Ciencias Tania Valdés González, jefa del Laboratorio de Teragnóstico establecido entre el Hospital Universitario General Calixto García y el Centro de Aplicaciones Tecnológicas y Desarrollo Nuclear (Ceaden), explicó que Curmeric es una emulsión que contiene extractos de Cúrcuma longa, cuyos resultados preliminares indican que es un producto natural seguro y pudiera prevenir la transmisión del SARS-CoV-2, lo cual se confirmará en un ensayo clínico.
La investigadora comentó a la prensa que en el año 2015 iniciaron un estudio para buscar evidencias científicas del uso de la planta en la prevención de diversas enfermedades respiratorias, pero a raíz del elevado número de casos contagiados con la COVID-19 en el país desde el año 2020, se reajustaron formulaciones para organizar las investigaciones en la atención primaria de Salud con la aplicación de Curmeric en la prevención del virus.
Valdés González precisó que la primera intervención sanitaria con el citado producto natural comenzó a principios de septiembre de este año en la cabecera provincial de Ciego de Ávila y en los municipios de Ciro Redondo, Florencia y Chambas, pertenecientes también a esa central provincia.
En el caso de Granma dijo que el estudio comenzará por el municipio de Cauto Cristo y más adelante se incluirá a Guisa y a otros territorios en dependencia de los índices de contagios de la enfermedad.
«En dichas intervenciones se incluyen sospechosos de la COVID-19 y contactos convivientes, esto quiere decir que una vez que se identifica una persona con síntomas se le entrega el Curmeric a esta y a los convivientes con él, quienes deben utilizarlo en gotas nasales durante 15 días», destacó la especialista.
Según detalla una información de La Demajagua, actualmente se acopian datos de la intervención sanitaria llevada a cabo en Ciego de Ávila y después se establecerán comparaciones para corroborar cuánto ha disminuido la transmisión de la enfermedad en los territorios donde se ha aplicado el producto, lo que permitirá, posteriormente, evaluar el impacto del Curmeric en la prevención de la transmisión de la COVID-19.
«Curmeric también tiene actividades contra cepas de bacterias de enfermedades respiratorias, o sea que de manera general, pudiera llegar a ser un producto que permitiría la prevención y tratamiento de enfermedades del sistema respiratorio», apuntó Valdés González.