En los últimos días circulan por las redes sociales mensajes que alertan sobre un supuesto robo de un cargamento de sal de nitro. Según algunos usuarios, el producto se está vendiendo como sal común en el mercado informal. Esta noticia es ENGAÑOSA y ha trascendido por la creencia de que la sal de nitro es mortal.
Las primeras publicaciones sobre el tema aparecieron el 3 de noviembre. En esa fecha, Google Trends registró un aumento puntual de las búsquedas realizadas en Cuba sobre el término “sal de nitro”. Al día siguiente la información alcanzó popularidad, cuando Juan Juan Almeida publicó detalles del suceso en su canal de YouTube.
De acuerdo con Almeida, el domingo 31 de octubre, alrededor de las 8:00 p. m., robaron dos toneladas de sal de nitro de un contenedor propiedad del almacén central del Ministerio de Comercio Interior (Mincin), ubicado en el municipio Caimito.
En la trasmisión, el presentador utiliza como evidencia un audio anónimo en el que una mujer cuenta lo sucedido. Luego, este mismo audio se publicó en Facebook como mensaje de voz de WhatsApp. Si bien no pudimos verificar la autenticidad del contenido, notamos un corte en el segundo 22 a partir de un cambio de tono y una marca de agua de InShot, aplicación para editar videos.
Además, Almeida mostró una fotografía del supuesto contenedor violentado que más tarde fue replicada por varios usuarios en forma de captura de pantalla.
El 5 de noviembre el usuario @Javi_Habana publicó un tuit en el que pedía a sus seguidores no comprar sal en la calle e informaba de la muerte de un muchacho luego de comerse una pizza que contenía este compuesto.
DeFacto se comunicó con el Ministerio de Comercio Interior para conocer sobre la veracidad de este hecho, pues la información implica una de sus unidades. La entidad dijo que no podía dar una respuesta porque desconocían la situación. Por el momento, ningún medio de prensa oficial se ha referido a este suceso.
Sobre el contenido difundido
Hasta ahora, el programa de Juan Juan Almeida es la fuente que más detalles ofrece sobre el suceso y la única referencia para muchos usuarios que comparten y piden que otros compartan la información. No obstante, sus argumentos no son coherentes.
Foto del supuesto contenedor robado, publicada en el canal Juan Juan AL MEDIO.
Según Almeida, el hecho ocurrió en “Caimito, Mayabeque”; cuando, en realidad, Caimito pertenece a la provincia Artemisa. Con los pocos datos conocidos, realizamos una búsqueda en Internet y en Google Maps de las etiquetas “taller central” y “almacén central” para ubicar el lugar del robo. No se encontró ninguna coincidencia.
Además, en las informaciones difundidas las personas sitúan el suceso en La Habana, Cienfuegos, Ciegos de Ávila, Camagüey y Holguín. Tampoco hay un consenso sobre la cantidad de sal de nitro robada: un camión, dos toneladas, dos sacos, un saco o no se menciona.
¿Es nociva la sal de nitro?
En las redes sociales se genera un estado de alarma e incertidumbre y los comentarios más comunes son que la sal de nitro es “fatal”, “pone en peligro vidas ajenas”, “mata”. Todo en la misma línea de la frase mencionada por Juan Juan Almeida en su canal: “si alguien compra sal de nitro, estará comprando su propia muerte”.
Según el diccionario Larousse Cocina, la sal de nitro es el nombre común del nitrato de potasio, compuesto químico que se emplea en la industria alimentaria como agente conservador, gracias a sus propiedades bactericidas.
En gastronomía es utilizado para “curar” carnes y embutidos principalmente. Este proceso se conoce como curado al seco y consiste en salar los alimentos para extraer la humedad de sus células e impedir que los microrganismos se desarrollaren.
Este aditivo puede causar intoxicación y, en el peor de los casos, la muerte; pero solo si es consumido en grandes dosis.
La investigación “Nitratos, nitritos y nitrosaminas en productos cárnicos (I)” explica que altos índices de nitrato de potasio en el organismo se transforman en nitritos a partir de la acción de bacterias digestivas. Estos compuestos pueden derivar en un proceso alérgico, actuar como vasodilatador e, incluso, desencadenar una metahemoglinemia; condición que reduce la cantidad de oxígeno en la sangre y, como consecuencia, impide el correcto funcionamiento de las células.
Para que esto suceda la persona debe ingerir al menos 30 gramos de sal de nitro en una sola comida, indica el sitio Salroche. Esta cantidad equivale a dos cucharas rasas aproximadamente. Para su uso culinario, la proporción recomendada es ½ gramo de nitrato de potasio por cada kilogramo de carne.
Visto esto, un caso como el informado por la cuenta @Javi_Habana resulta, cuando menos, imposible.
¿Cuáles son los síntomas por intoxicación con sal de nitro?
La base de datos Fichas Internacionales de Seguridad Química (ICSCs, por su sigla en inglés) explica que la ingestión o inhalación de nitrato de potasio provoca síntomas como labios, uñas y piel azulados, dolor abdominal, vértigo, dificultad respiratoria, convulsiones, diarrea, dolor de cabeza, náuseas y pérdida del conocimiento.
Este cuadro clínico puede aparecer inmediatamente después de consumir la sustancia, o bien, en las horas posteriores. En caso de ingerir por error sal de nitro, se recomienda enjugarse la boca y buscar asistencia médica.
El único antecedente comprobado que encontramos fue un estudio retrospectivo en 39 pacientes egresados del Centro Nacional de Toxicología, entre 1988 y 1995, que explica que “los nitritos en forma de sales constituyeron la principal causa de intoxicación”. En estos casos, no se presentaron complicaciones y la estadía en el hospital fue de 48 horas como promedio.
A simple vista es difícil distinguir la sal de nitro de la sal común, pues ambas tienen un aspecto físico muy parecido. El nitrato de potasio luce como un polvo cristalino que va de incoloro a blanco. La mejor manera de identificarlo es por su característico sabor acre.
Aunque resulta difícil demostrar que no ocurrió un robo de este producto; la información que está circulando carece de pruebas documentales que lo confirmen, es contradictoria y sobre todo exagerada.
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