Marbelis Vázquez Hernández no sale de su estupor desde que la semana pasada el abogado que contrató le comunicara que la Fiscalía pide para su esposo Daniel Joel Cárdenas Díaz, 27 años de privación de libertad.
“Dice el defensor que todavía no le ha llegado la petición fiscal, que debe tenerla esta semana, pero para que me fuera preparando para los años que le piden”, lamentó la mujer en conversación telefónica con Radio Televisión Martí.
“Me parece que por tirar piedras e ir a una manifestación, es demasiado, porque ellos están cuidando los bienes de ellos, lo que mi esposo les hizo a ellos, y lo que me hicieron a mí y a mis hijos ¿quién me lo paga? Ellos entraron por la fuerza a mi casa, tiraron tiros”, dijo.
Daniel Joel Cárdenas Díaz, en prisión preventiva en el penal Agüica de Colón, Matanzas, fue arrestado en su casa. Efectivos de los llamados ‘Boinas Negras’ le dispararon delante de su familia, según se puede apreciar en un video que circuló en redes, donde aparece el operativo policial y luego Marbelis con una niña en brazos, mostrando un charco de sangre.
“El 13 de julio, a las 11 de la mañana yo estaba en mi casa con mis tres niños menores de edad y su papá estaba jugando con ellos. De pronto, por la ventana entreabierta, veo un camión lleno de guardias que se bajaban con perros y armas. Uno de los ‘boinas negras’ empieza a golpear mi puerta y a darle patadas. Yo salgo y pregunto ¿qué pasa? Miren mis hijos gritando, tienen miedo”.
“De pronto por el patio de mi casa, siento unos tiros. Mi perra viene corriendo y detrás, dos uniformados de negro y uno de civil, con armas, que son los que entran en mi casa y le disparan a mi esposo. El cae en el piso lleno de sangre y a mí me arrodillan en un rincón con mis hijos. Luego recogen a mi esposo y se lo llevan con una herida de 12 centímetros en la cabeza. Después me decían que era mentira que Daniel Joel estaba herido, pero yo ya pude verlo y vi su cicatriz, pero no recuerda que se la causó”, relató Vázquez Hernández.
El 14 de julio el doctor Carlos Anderez González certificó, en un trozo de papel escrito a mano que la herida de Cárdenas Díaz había sido producida por una contusión, según reza la denuncia al Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU, del abogado Sergio Osmín Fernández Palacios.
Los videos de los enfrentamientos entre efectivos policiales, tropas antimotines y grupos paramilitares de civil abundan desde que el mismo 11 de julio, el gobernante Miguel Díaz-Canel llamara a sus adeptos a “enfrentar en las calles” a los miles de cubanos que en todo el país salieron a protestar contra el régimen.
Cárdenas Díaz está acusado de los delitos de sabotaje, desórdenes públicos, propagación de epidemias y corrupción de menores.
“Yo hice una denuncia a la Fiscalía Militar sobre eso. ¿Por qué corrupción de menores? Esos niños que andaban con él son nuestros vecinos. Los obligaron a decir que mi esposo les pagó para ir a la manifestación y aun así les echaron un año de internamiento. Están en una cárcel de menores. Uno tiene 12 y el otro, 14”, apunta Vázquez Hernández.
Pese a múltiples denuncias sobre lesionados y muertos durante las protestas, el Ministerio del Interior (MININT) cubano sólo reconoció la muerte del joven Diubis Laurencio Tejeda en La Güinera, Arroyo Naranjo, La Habana.
“Aquí en Cárdenas hay mucha gente que fue herida de bala durante las marchas pero ya salieron de la cárcel bajo fianza, incluso uno es vecino mío”, indicó Vázquez Hernández.
Las autoridades cubanas han insistido en que “nadie está privado de libertad por manifestarse” sino que se trata de personas que cometieron delitos.
La demanda por la liberación a los detenidos en el marco de las protestas del 11 y 12 de julio ha adquirido mayor relevancia en las últimas semanas, tras la convocatoria a la Marcha Cívica del 15 de noviembre que tiene ese entre sus objetivos fundamentales.
