En este sentido, recordó cómo en pocas horas el país recobró la calma, mantenida en todas estas semanas y meses, a pesar de las constantes provocaciones y llamados desde el exterior a manifestaciones, a crear incidentes y situaciones que alteren la estabilidad.
Apuntó que Cuba es objetivo de una guerra no convencional y calificó de intenso el trabajo político-ideológico desplegado en función del enfrentamiento a tales agresiones.
El también presidente de la República habló sobre la importancia de defender la manera de hacer gobierno, de ejercer el poder del pueblo, ‘que es donde descansa el concepto de nuestra soberanía’, dijo.
Señaló la urgencia de siempre rendir cuentas a la población y a las estructuras que la representan, y defendió el perfeccionamiento de la relación de trabajo entre el Partido y los órganos superiores del Estado.
Díaz-Canel significó que el PCC debe centrarse en el aseguramiento político a los principales procesos: los ideológicos, los económicos, y los sociales, para que el resto de los organismos desempeñen los programas, tareas y proyecciones de la Revolución.
Todo lo que está claro a nivel nacional en cuanto a modos de ejercer gobierno debe trasladarse con éxito a los ámbitos de la provincia y el municipio, dijo de acuerdo con el diario local Granma.
El jefe de Estado remarcó la prioridad dada a la atención de personas en condición de vulnerabilidad y defendió la sistematización del diálogo entre la máxima dirección del país y diversos sectores de la sociedad.
El II Pleno, que sesionará hasta mañana en el Palacio de Convenciones de esta capital, evaluó la implementación de los acuerdos derivados del 8vo Congreso del PCC, celebrado entre el 16 y el 19 de abril último.
El secretario de Organización y Política de Cuadros, Roberto Morales Ojeda, presentó el informe central, que reúne referencias sobre el desarrollo de la economía.
El foro partidista aprobó el programa para la transformación del trabajo político-ideológico, con herramientas teóricas y metodológicas para dar respuesta a los retos de la sociedad cubana y forjar una cultura emancipadora contra toda forma de prejuicio y discriminación, en favor de la unidad nacional.
Los presentes además dieron el sí a la estrategia general para la política de cuadros en el período 2021-2026.
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