Las micro, micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) autorizadas en Cuba suman 234 desde su autorización hace un mes, la mayoría de ellas en el sector privado, informó este jueves el Ministerio de Economía y Planificación (MEP).
El 51 % del total son negocios que ya existían, y el 49 % restante corresponde a nuevos emprendimientos que ejercen mayoritariamente la producción de alimentos, actividades manufactureras y otras, detalló el MEP.
El @MEP_CUBA aprobó hoy 72 nuevas Mipymes y 1 CNA. Cumplido el primer mes, se han aprobado 234 Mipymes y 7 CNA. Muy buen comienzo. Todos los detalles en nuestros canales digitales. #ACubaPonleCorazón pic.twitter.com/XXyy6RiQr2
— Alejandro Gil Fernández (@AlejandroGilF) October 20, 2021
El Gobierno cubano aprobó en agosto pasado 8 decretos-leyes con los que reconoce y amplía la gestión de las Mipymes, las cooperativas no agropecuarias y el trabajo por cuenta propia (autónomo) como actores económicos.
Un mes después, autorizó las primeras 35 Mipymes que en su versión cubana pueden tener propiedad estatal, privada o mixta, al tiempo que son reconocidas como unidades económicas con personalidad jurídica y con características propias.
Pueden integrarse por uno o más socios, se constituyen como sociedades mercantiles y se clasifican en dependencia del número de personas ocupadas como: micro empresa, cuyo rango de ocupados es de una a 10 personas; pequeña empresa, de 11 a 35; y mediana empresa, de 36 a 100 personas.
Forman parte de los actores económicos reconocidos en el país junto con la empresa estatal socialista –el principal, según lo establecido en la Isla– las cooperativas no agropecuarias y el trabajo por cuenta propia (privado).
La llegada a la escena económica cubana de las Mipymes representa un avance hacia un modelo mixto, aun cuando la gestión estatal seguirá predominando en un escenario lleno de limitaciones, según expertos.
Publicidad
El profesor asociado del Departamento de Economía de la colombiana Pontificia Universidad Javeriana de Cali, Pavel Vidal, explicó a EFE que las Mipymes dan inicio al modelo de economía mixta, al menos en términos de empleo y número de compañías.
«Son fuente de innovación, le añaden flexibilidad al tejido empresarial y contribuyen a la competitividad de las grandes empresas, tanto nacionales como extranjeras», añadió Vidal.
Sin embargo, quedarán muy lejos de tener una participación destacada en el Producto Interior Bruto por las restricciones a la acumulación: «Nadie puede estar en más de una Pyme o ser socio de más de una cooperativa, y hay un límite máximo de 100 empleados», detalló el experto como argumentos de lo anterior.
EFE / OnCuba
