Este sábado Cuba volverá a aparecer en una final mundial de velocidad, pues allí la volvió a poner Shainer Rengifo Montoya, al entrar entre los ocho que disputarán las preseas en los 200 metros en la justa del orbe de atletismo juvenil Sub-20, en la ciudad kenyana de Nairobi.
Rengifo Montoya ha sido en la lid un gallo de pelea.En cada salida a la pista se supera asimismo, postura premiada con el bronce en el hectómetro y su mejor marca personal de 10,28 segundos. En los 200, no ha sido diferente, en las eliminatorias de este viernes capturó un lugar en las semifinales al detener los relojes en 20,95, su mejor registro del año, y ya en la instancia que le abría las puertas a los ocho vanguardistas, fue aún más: sus 20,58, nunca antes conseguidos por él, lo hicieron merecedor de uno de los dos tiempos favorecidos para la final.
Al parecer, el nigeriano Udodi Chudi Onwuzurike está fuera de órbita con sus excepcionales 20,13; con los que lideró las semifinales, mientras el campeón de los cien metros, Letsile Tebogo (20,31), de Bostwana, también se ve muy lejos para el resto de los finalistas. El ugandés Tarsis Orogot (20,37), el sudafricano Sinesipho Dambile (20,45) y el israelí Blessing Akawasi Afrifah (20,49), serán, junto a los dos primeros, los principales rivales del cubano, aun cuando el objetivo medallista pudiera estar más centrado en superar a la terna de Orogot, Dambile y Akawasi.
Y en la jaula del lanzamiento del martillo, una fuerte lid dejó fuera de las medallas al cubano Ronald Mencia. Disparos medallistas por encima de los 77 metros dieron a la justa, en la tercera velada de la cita mundialista, un altísimo nivel.
En sus dos primeras apariciones. Mencia cometió foul. Se puso en competencia en su tercera salida, con 69,84; en la cuarta se quedó solo en 68,83, y en la quinta logró superar los 70 metros, pero con insuficientes 71,60. Debe consignarse que si bien estuvo muy lejos de suregistro personal de 77,20, incluso del 74,98 de la fase clasificatoria de esta porfía, aun alcanzándolos no hubiera pasado del quinto escaño. Así de encumbrada resultó la prueba.
Fue el líder de la temporada, el checo Jan Dolezalek quien llevo más lejos el pesado implemento hasta hacerlo caer, en su quinto intento, en el nuevo tope para su carrera deportiva, medido en 77 metros y 83 centímetros. Con ello superó los 77,78 del griego Orestis Ntousakis, puntero de la final hasta la tercera ronda de envíos. Jean Baptiste, de Francia, con 77,70 recibió la presea de bronce. Y aunque rebasó los 77 metros en nueve centímetros, el polaco Dawid Pilat, no pudo asistir a la ceremonia de premiaciones.
Cuando este sábado se celebrará la última fecha del evento del planeta para bisoños, Cuba, con solo cinco atletas, marcha séptima en el medallero, con una presea de oro y dos de bronce. Kenia (3-1-2), Finlandia (2-1-0) y Etiopía (1-3-1) encabezan el listado de lauros.