El Ministerio de Industrias, con su grupo empresarial Gesime, de conjunto con el Ministerio de la Agricultura trabajan con empresas nacionales en el diseño y fabricación de modelos cubanos de cosechadoras de granos autopropulsadas y otros agregados a tractores, necesarios para impulsar la producción agrícola en el país.
Según información publicada en el portal web del Minag, la idea es contar con maquinarias propias como alternativa a las ya existentes en Cuba, todas adquiridas en el exterior a altísimos costos, como la Massey Ferguson modelo MF 5650, con un ancho de corte de hasta 5,8 m y una productividad de 6,6 t/h.
Los nuevos equipos tendrán como reto alcanzar los rendimientos de los modelos importados capaces de recolectar granos o cereales sembrados en áreas de grandes extensiones. El Instituto de Investigaciones de Ingeniería Agrícola (IAgric) será el responsable de dar el dictamen final sobre los resultados de las innovaciones cubanas, para proceder a la fabricación en serie de estas.
De acuerdo con el el Ministerio de la Agricultura, la producción en masa dependerá de la disponibilidad de financiamiento y de los recursos que se destinen al programa para impulsar la industria nacional.
En los últimos años, Cuba ha importado unidades cosechadoras de frijol y maíz Jumil 390, de fabricación brasileña, y certificadas por el IAgric, que van acopladas a un lado del tractor, para recoger, trillar y limpiar los granos con gran eficacia.
Las evaluaciones realizadas en las provincias de Artemisa y Mayabeque arrojaron una productividad de 0,7 t/h en maíz, con pérdidas de solo 3,2 %, y de 1,0 t/h en frijol, con pérdidas de 5,1 %.
El equipo puede adquirirse con órganos especiales para la cosecha de maíz, en dos surcos; una plataforma para recogida de frijol arrancado y colocado en hileras (hasta 6 hileras o 1,3 m) y una segadora para la recolección de cereales (2,0 m de ancho).
Las transformaciones en la maquinaria agrícola forman parte del plan para el fomento de la producción nacional de granos, principalmente frijol, maíz y soya, que desarrolla el Ministerio de la Agricultura, y que incluye, además, cambios en las instalaciones de secado, beneficio y almacenamiento de producto agrícola.