Con más de 1 000 confirmados con COVID-19 en los últimos 15 días y una tasa de incidencia de 219,9 casos por cada 100 mil habitantes, hasta este lunes, la provincia de Guantánamo vive en el tercer rebrote de la enfermedad, uno de los momentos más tensos de la pandemia, dada la dispersión del número de infectados en nueve de los diez municipios del territorio.
En reunión del Grupo temporal provincial para la prevención y control del nuevo coronavirus, se detalló que al cierre de este fin de semana se vigilaban siete pacientes en la terapia intensiva del Hospital General Docente Dr. Agostinho Neto, por complicaciones derivadas de la COVID-19 y con peligro para sus vidas, por la convergencia de patologías como la hipertensión, cardiopatías, diabetes y otras comorbilidades.
Además suman 100 los pacientes pediátricos con COVID-19 y seis los eventos de transmisión local del virus, cinco en Baracoa y uno en Niceto Pérez, lo que unido a los 97 controles de foco existentes en comunidades guantanameras, la mayoría en la ciudad del Guaso y Baracoa, constituye un indicio de la compleja situación que se vive en esta porción de Cuba.
El aumento del número de contactos (más de 1 000) y sospechosos a diario ha provocado una saturación en la capacidad de los centros de aislamiento, por lo que las autoridades tomaron como alternativa implementar momentáneamente la cuarentena domiciliaria a todo aquel que esté relacionado con un positivo o paciente con sintomatología, bajo estricta vigilancia mientras se espera el resultado de PCR confirmatorio, que sí implicaría un ingreso inmediato.
Como parte de la estrategia de enfrentamiento a la pandemia el grupo temporal decidió restringir las visitas entre municipios, con excepción de los casos autorizados por los grupos temporales, y se prohibió desde las 8:00 de la noche hasta 5:00 de la madrugada la movilidad de personas y de medios automotores y de tracción animal en las ciudades de Guantánamo y Baracoa.
Las salidas de la provincia solo serán autorizadas a personas con razones evidentemente justificadas como turnos médicos oncológicos, fallecimientos de familiares, viajes al exterior, regreso a sus lugares de origen, y recogida de paquetería, siempre coordinado con Santiago de Cuba y la dirección de Transporte. Los equipos de carga no pueden llevar pasajeros.
Igualmente como precaución se decidió aislar y mantener bajo observación a los ciudadanos procedentes de Holguín y Matanzas, donde circula la nueva cepa Delta, para evitar que entre esa peligrosa variante al alto oriente cubano.
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Rolider Romero Frómeta, titular de Salud en el Alto Oriente Cubano, informó que el territorio trabaja en el aumento de la capacidad de procesamiento y detección del SarsCov2, mediante la incorporación de la técnica de los laboratorios Suma para la realización de test de antígenos. Igualmente el Laboratorio de Bilogía Molecular analiza unas 700 muestras a diario para dar respuesta inmediata al presente panorama epidemiológico.
La continua llegada de viajeros de La Habana, Matanzas, Santiago de Cuba y Holguín, con reportes de violación de la cuarentena que deben cumplir, la indisciplina social y la baja percepción de riesgo tanto en los hogares como en centro laborales estatales, así como el ocultamiento de síntomas y de información relevante en las encuestas epidemiológicas hacen cada vez más difícil el enfrentamiento a la COVID-19 en Guantánamo.
El gobernador Emilio Matos Mosqueda insistió en que si bien se han reforzado las acciones preventivas y punitivas para erradicar las conductas que han hecho vulnerable al territorio, hoy se requiere más que nunca del apoyo de la familia, las organizaciones de masas, y el pueblo todo al sistema de Salud, en el cumplimiento del aislamiento domiciliario y en las pesquisas, de lo contrario será imposible controlar la propagación del patógeno.
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