El Observatorio de Libertad Académica, OLA, presentó su octavo informe sobre la violación de los derechos de libertad académica y autonomía universitaria en Cuba y reiteró que la persecución política e ideológica en las instituciones académicas en la isla ha sido una táctica represiva desde el comienzo de la dictadura castrista.
Este documento, indicó OLA, no constituye un resumen ni un balance de las discriminaciones por motivos ideológicos y las violaciones a la libertad académica en la educación superior cubana posterior a 1959. “Es parte de un trabajo gradual y sistemático que mensualmente documenta cuatro casos (dos históricos y dos posteriores a 2010) de profesores y/o estudiantes víctimas de este tipo de discriminación e incluye el análisis de un discurso y una regulación que atentan contra derechos relacionados con la libertad académica”.
El informe de OLA (entidad con sede en la Universidad Sergio Arboleda, en Colombia), presentó los casos históricos del profesor Amador Perfecto Blanco Hernández y la entonces, próxima a graduarse, estudiante Yamisleidy Gómez Yanes, ambos ocurridos en el Instituto Superior Pedagógico “Félix Varela”.
Como casos actuales el instituto analizó lo ocurrido con el investigador agregado del INOR y profesor del Departamento de Bioquímica de la Universidad de La Habana, Oscar Antonio Casanella Saint-Blancard, y Félix Llerena, estudiante de primer año para ese entonces, de Marxismo Leninismo e Historia, en la Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”.
El profesor Amador Perfecto Blanco, al criticar en sus clases el período de la Unión Soviética bajo Iósif Stalin, fue expulsado de la universidad y se le “impidió ejercer la pedagogía en ningún nivel educacional del país”. También fue víctima de un acto de repudio por parte de sus alumnos y objeto de una campaña de descrédito.
Yamisleidy Gómez Yanes fue expulsada del instituto universitario a solo cuatro días de presentar su tesis por mantener una relación matrimonial con un activista de derechos humanos. OLA estableció en el informe que considera ambos casos como una violación a los derechos de libertad académica y autonomía universitaria.
Por otra parte, Félix Llerena fue objeto de amenazas por parte de la Seguridad del Estado y expulsado de la institución por supuesta “inasistencia”, y por exponer en Estados Unidos las violaciones a las libertades religiosas en la isla en un seminario organizado por la Universidad de Miami y la Fundación Rescate Jurídica.
OLA considera estos hechos como una clara violación a la libertad de expresión y opinión, a la libertad de pensamiento o conciencia, el debido proceso, y la libertad académica, entre otros.
El último caso presentado por el Observatorio fue el del biólogo Casanella, quien desde el 2013 empezó a ser a acosado por la Seguridad de Estado por relacionarse amistosamente con opositores al gobierno cubano y posteriormente expulsado del Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología (INOR).
Luego Casanella se involucró en el activismo y por consecuente ha sido víctima de acoso, detenciones violentas, amenazas golpizas, arresto domiciliares ilegales y prohibiciones de salir del país. Además, no ha vuelto ejercer su profesión, ni como investigador, ni como docente.
Para dar mas contexto a la política cubana de suprimir la libertad académica, OLA toma en cuenta dos discursos pronunciados por Fidel Castro: el primero, 13 de julio de 1979, en el acto de graduación del Destacamento Pedagógico “Manuel Ascunce Domenech”; y el segundo, el 7 de julio de 1981, en el de 10.658 egresados del mismo Destacamento Pedagógico, ahora de nivel universitario.
“Ambos discursos estuvieron dirigidos a hacer un llamado a los docentes y estudiantes cubanos para hacer parte del perfeccionamiento del sistema educativo, en el sentido de cumplir el ideal revolucionario e impulsar un modelo de enseñanza excluyente en donde la socialización de los valores comunistas sería la única forma de impartir la docencia”, subayó el informe del Obervatorio de Libertad Académica.
