Al cierre de la jornada anterior la provincia confirma 29 casos positivos a la COVID-19 y si bien la cifra no es de las más elevadas de esta semana, continúa marcando la dispersión que no cede en este rebrote: seis de los ocho municipios espirituanos notifican enfermos.
Prevalecen, como ha venido sucediendo, los casos autóctonos —28 de los diagnosticados ayer, pues uno es importado que se trata de un viajero cabaiguanense procedente de Rusia—, pero también sigue agravándose la imprecisión en la fuente de los contagios con seis personas en este caso al cierre de la jornada precedente.
Lo otro que se reitera y que evidencia la complejidad epidemiológica, por demás gravísima, son las cifras de la capital provincial: 15 de los diagnosticados corresponden al municipio cabecera, de los cuales el mayor número pertenece al policlínico Centro con ocho; al Sur, tres e igual número a Los Olivos —en ambos lugares hay un caso sin nexo epidemiológico establecido aún— y uno a Guasimal.
Si desde hace algunos días Cabaiguán ha estado ausente de los reportes —o cuanto más ha notificado dos o tres enfermos— ayer diagnostica seis pacientes. Por su parte, Jatibonico computa tres; Trinidad desciende a dos y Yaguajay y La Sierpe confirma un enfermo en cada caso.
De los cuatro eventos de transmisión abiertos en la provincia el más activo es el institucional que corresponde a la Universidad de Ciencias Médicas, donde al cierre de ayer se han confirmado cuatro nuevos contagios para sumar 32 personas infectadas por el nuevo coronavirus.
Y lo otro que sigue cuesta arriba es la tasa de incidencia de casos confirmados en la última quincena al ascender a 108. 90 por 100 000 habitantes con 504 personas diagnosticadas con la enfermedad. Por encima de la media provincial se ubican tres territorios: Jatibonico con 185. 79; Sancti Spíritus, 157. 27 y Trinidad, 141. 10.
Pero, lo más desfavorable de la jornada es el cómputo de dos pacientes espirituanos en estado crítico e igual número grave. Entre los primeros se halla, según explicita el parte oficial del Ministerio de Salud Pública, una neonata de 22 días de nacida, de Cabaiguán, reportada de crítica estable y un anciano de 87 años de edad, del municipio cabecera, en estado crítico inestable.
Por su parte, en estado grave se encuentra un joven de 23 años de edad, de la cabecera provincial, y otro de 29 años de edad, de Trinidad.
La complejidad epidemiológica de la provincia, como se ve, exige más responsabilidad para revertirla.
