El Informe de EEUU sobre la Religión en el Mundo 2020, incluyó las violaciones a la libertad religiosa por parte del régimen cubano, de acuerdo a la organización de defensa de la libertad religiosa Christian Solidarity Worldwide (CSW) y líderes religiosos, el Partido Comunista de Cuba (PCC), ha seguido controlando la mayoría delos aspectos religiosos de la vida cotidiana en el país caribeño, recoge Martí Noticias.
A manera de conclusión CSW determinó que la dictadura cubana «violó la libertad de religión o creencias de manera rutinaria y sistemática» mediante detenciones arbitrarias, acusaciones falsas, amenazas y hostigamiento de líderes religiosos y defensores de la libertad religiosa».
Asimismo el reporte indica que el régimen confiscó alimentos que algunos grupos religiosos tenían la intención de proporcionar a los cubanos más necesitados, y bloqueó la ayuda humanitaria, en medio de la pandemia de Covid-19.
Destacando también que las autoridades cubanas amenazaron a líderes religiosos con procesos penales por supuestamente «propagar enfermedades».
Por otra parte, el informe recogió el hostigamiento al pastor de la Iglesia Apostólica de Santiago de Cuba, Alain Toledano, y a los activistas que abogan por una mayor libertad religiosa y política en Cuba, como Berta Soler, líder de las Damas de Blanco, entre otros.
El secretario de Estado estadounidense Antony Blinken, recordó el miércoles de esta semana que «la libertad religiosa es un derecho humano; de hecho, va en la esencia de lo que significa ser humano: pensar libremente, seguir nuestra conciencia, cambiar nuestras creencias si nuestras emociones y mentes nos llevan a ello, expresar esas creencias en público y en privado».
«Esta libertad está consagrada en la Declaración Universal de Derechos Humanos. También forma parte de la Primera enmienda de la Constitución de Estados Unidos. El compromiso de nuestro país con la defensa de la libertad de culto y creencias se remonta a siglos atrás. Continúa hoy en día», sostuvo.
Este informe que Estados Unidos elabora anualmente desde hace 23 años, brinda «una revisión exhaustiva del estado de la libertad religiosa en casi 200 países y territorios de todo el mundo».
